Buckminster Fuller (1895-1983) es uno de los héroes de Futuratrónics. Criado en el seno de una familia prestigiosa y tradicional del noreste de los Estados Unidos, a los 32 años se dio cuenta que su vida era un fracaso y decidió suicidarse.
Acá el mismo describe ese momento:
En ese momento se iluminó. Se dio cuenta que su vida no era suya. Ósea, que era un regalo, una cosa casi aparte de el. Con este súbito conocimiento decidió ver qué podía hacer un solo hombre para cambiar el mundo. Reconcibió su vida como un gran experimento.
(Vean la excelente biografía en Wikipedia)
Sin recursos, salvo su genio, tuvo una larga carrera inortodoxa: es arquitecto, visionario, diseñador, ecologísta, filosofo, excéntrico, profesor, profeta tecnológico, escritor, poeta...
Entre otras cosas fue, que yo sepa, uno de los primeros seres en concebir a nuestro planeta como una nave espacial. Lejos de ser una metáfora de ciencia ficción esta idea tiene implicaciones profundas. Esta es nuestra nave. No vamos a poder irnos a ningún otro lado si la arruinamos.
Una de las convicciones de Buckminster era que es inaudito que exisite la pobreza y el hambre entre nosotros. Hay suficientes recursos para que todo el mundo disfruta la vida, bien alimentados y en viviendas cómodas y alegres.
Buckminster es infinito. Si le hacemos caso se salva el planeta. Si no, no.
Se inaguró en Noguchi Museum en Queens, Nueva York una muestra sobre la amistad entre el escultor Isamu Noguchi y Fuller.
Dura hasta el 15 de Octubre. Si pueden ir, vayan. Si no veanlo en el sitio del museo.
Via: Boing Boing
Imagen: fuente, fuente, fuente.
18.5.06
Buckminster Fuller Forever: La vida es un gran experimento
Publicadas por Andrés Hax a la/s 5/18/2006
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